- Raciones: 4 Persona(s)
- Tiempo de Preparación: 14
- Tiempo de Cocinado: 40
- Calorías: 180
- Dificultad:
Fácil
Hay personas a las que la coliflor les causa un rechazo casi visceral, casi siempre motivado por ese desagradable olor que libera al cocerse. Los responsables de ese aroma sulfuroso son unos compuestos de la familia del azufre, llamados isotiocianatos, que se volatilizan al entrar en contacto con el agua hirviendo. Por internet circulan una retahíla de trucos que prometen acabar con este inconveniente, pero lo cierto es que su eficacia resulta bastante dudosa.
No obstante, la coliflor es un alimento excepcional, no solo en lo nutritivo, ya que es fuente de proteínas, potasio y vitamina C, sino también en la esfera gustativa. Presenta un sabor suave, atenuado, que en función de la variedad, tiempo de cocción y estado de maduración, puede tornarse en dulzón. Hoy traemos una receta imprescindible para los amantes de esta verdura, propuesta que incluso podría llegar a encandilar a sus firmes detractores.
La crema de coliflor, apodada en ocasiones crema Du Barry, cuenta con unos orígenes bastante curiosos. Jeanne Bécu, conocida como Madame Du Barry, fue una bella mujer amante de Luis XV. Dejando a un lado las intrigas palaciegas, y centrándonos en lo puramente gastronómico, Du Barry era una ferviente devota de la coliflor, a la cual atribuía propiedades reconstituyes y medicinales. Tanto es así, que impuso la crema de coliflor en la corte, asesorando a los cocineros de palacio.
Incluso aquellos que muestra una animadversión manifiesta a esta verdura, pueden dejarse seducir por el discreto encanto de esta crema que, dicho sea de paso, posee un sabor perfectamente equilibrado. La temporada de la coliflor en España va desde el mes de noviembre hasta el mes de abril, sin embargo, puede disfrutarse de forma temprana y tardía, más acá y allá de estas fechas. Si hay una virtud innata en la Thermomix, es la de preparar cremas untuosas, finas y sabrosas.
Ingredientes
Instrucciones
- Cogeremos el puerro, desproveyéndole de la las hojas y lavándolo previamente bajo un chorro de agua fría. Recomiendo hacer un corte en cruz en los extremos, zona donde suele acumular más tierra. Cortaremos en trozos bastos y la introduciremos en el vaso, programando 4 segundos a velocidad 5. A continuación, con una espátula, bajaremos los restos de las paredes.
- Incorporaremos la mantequilla. Aquí me gustaría hacer un inciso, y es que desde hace unos años se ha impuesto una moda, producto del marketing, que denigra la mantequilla y encumbra a las marginas que se publicitan como bajas en calorías. La mantequilla de calidad es nutricional y gustativamente un producto de mucha mejor calidad que esas grasas vegetales hidrogenadas.
- Programaremos 8 minutos a 100º y velocidad 2. Transcurrido el tiempo, añadiremos la coliflor, seguida de las patatas y la leche, programando nuevamente 30 minutos a 90º y velocidad 2. Aguardaremos unos minutos a que se atempere la mezcla y entonces la trituraremos, programando 2 minutos a velocidad progresiva oscilante 5 - 10.
- Finalmente, agregaremos la nata, la sal, la pimienta y la nuez moscada, qué va, como siempre, al gusto. Sed cuidados sobre todo con la nuez moscada, pues se trata de una especia con sabor muy intenso que podría eclipsar el sutil gusto de la coliflor. Programaremos 2 minutos, a 100º y velocidad 3. ¡Et voilá! Puede consumirse tanto fría, como templada o caliente. E
- Como sugerencia de presentación os proponemos presentarla en pequeños cuencos, con un poco de perejil picado o cebollino, y rematar con unos picatostes y un chorro de AOVE. Personalmente, creo que la coliflor se lleva a las mil maravillas con el queso azul, pudiendo espolvorear un poco de este por encima. Al igual que ocurre con la nuez moscada, un toque está bien, pero no debemos pasarnos.
- Existe una alternativa para los intolerantes a la lactosa, o simplemente para los que prefieren una crema más ligera. Sustituiremos toda la leche por caldo de ave, en este caso de pollo. Como muchos sabrán, la nata y la mantequilla albergan un contenido en lactosa ínfimo, por debajo del 3%, lo que permite a la mayoría de los intolerantes incluir estos productos en su dieta.
- ¡Qué aproveche!
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